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Fue oficiada en marzo del 2014, la Sra. Nathalie Anny Ninaya Garro, Gerente Central de gestión de las personas de EsSalud, luego al Ministerio público, prevención del delito, el 2013, quienes recomiendan al Dr. Félix Rivera Pinto, entonces director de dicho hospital, realice las gestiones correspondientes, a fin de que las plazas indicadas sean cubiertas a la brevedad posible, se ofició también el 2013 al Dr. Fernando Farfán Delgado, Gerente de la red asistencial de EsSalud en Arequipa, reponer las plazas de médicos especialistas, pero ha desoído tal pedido, ahora si responde, pero amenazando con bajar de categoría al Hospital II Manuel de Torres Muñoz. Se ha oficiado entonces a diversas instancias, incluso al Congreso de la república, quienes también se han unido a este reclamo, pero ahora se cierne sobre dicho hospital la amenaza de la evaluación, para según ello calificar y categorizar el nivel de dicho hospital. Según la información que tenemos, ya el año pasado se hizo una autoevaluación y esta arrojó apenas 25 puntos, significa esto que ante una nueva evaluación, que sería en los próximos días, el Hospital Manuel de Torres Muñoz corre el riesgo de convertirse en un simple policlínico, es decir quedaría con menos de lo que tiene. Eso no es mejorar, eso es poner en riesgo la salud. Existe el Comité de Categorización de Hospitales de la Región, quienes luego de evaluar y señalar en la parte correspondiente de conclusiones, las deficiencias de su personal y su administración y logística, reitero deficiencias de rendimiento del hospital, conforme a un protocolo, y de acuerdo a ello, la categoría que le correspondería a este hospital en este caso sería I, es decir, para los entendidos en la materia, tendría el nivel de policlínico. Probablemente se le dé un plazo de 90 días, para que se levanten las observaciones, sobre las deficiencias expuestas en ese informe, de tal manera que los responsables de la administración del hospital de EsSalud de esta ciudad, tendrían un arduo trabajo, para evitar que este nosocomio pierda su actual categoría, pero tenemos la información que en el cuerpo médico de ese hospital, hay un sector de personal médico, que subterráneamente actúa con irresponsabilidad y son ellos los que desde dentro están minando la institución, ocasionando esta baja calificación, porque les convendría desaparezca este hospital, para ellos retornar a la ciudad de Arequipa, en donde tendrían mejores ingresos económicos y otros beneficios. Esta baja calificación y categorización significaría perder presupuesto, por lo tanto no contar con adecuados stocks de medicina, peor de lo que ya viene ocurriendo actualmente, perder profesionales en la salud, en perjuicio de la atención a los asegurados, entre otros aspectos. Los asegurados deben conocer sobre estos graves riesgos, deben exigir y con fuerza solicitar a las autoridades de los diferentes niveles de gobierno, en especial a la Red Asistencial de EsSalud de Arequipa, a cargo del Dr. Farfán, se avoque a mejorar las condiciones hospitalarias y evitar problemas con la atención a los asegurados en la provincia requieren mejor atención y en vez de amenazar con evaluaciones que traerán graves consecuencia y la responsabilidad será de él, poner disciplina y lograr que los médicos de Mollendo actúen con buena ética. Islay es una provincia que tiene una población con ciertas particularidades, existen pescadores, agricultores, mineros, trabajadores portuarios, los tradicionales de construcción, empresas, escolares, pero una gran población materno infantil y de la tercera edad, de modo que las necesidades claras son pediatría, urología nefrología, cardiología, solo para citar algunas especialidades, pero los pacientes tienen que viajar a la ciudad de Arequipa, ocasionando con ello inversión económica, de tiempo riesgos y retornos frecuentes, cuando esa atención debería recibirse en un hospital II como es Manuel de Torres Muñoz, es decir dicho hospital debe contar con especialistas, medicinas y servicios auxiliares ad hoc y no bajarlo de categoría. Creemos que no está cumpliéndose conforme al juramento hipocrático, tampoco frente a la real demanda de la población y mucho menos en lo que se refiere a la defensa de la vida y la salud, que es lo que corresponde a un gerente responsable, y si en todo caso se estaría planteando una denuncia penal en contra del Dr. Fernando Farfán Delgado, Gerente de la Red Asistencial de EsSalud de Arequipa, es muy acertado, ya que nosotros también sindicamos al Dr. Fernando Farfán Delgado como el gran responsable en estos irregulares procedimientos, pero como detrás de él parece existir respaldo político, se cita a una congresista nacionalista por Arequipa, de ser así, entonces tenemos aquí un claro caso de intereses en juego, pero el hecho en si es que esos especialistas que ya existían, fueron llevados a Arequipa y dejado en abandono a la provincia de Islay. ¿Qué hizo al respecto el Dr. Fernando Farfán ante el reclamo de mucho tiempo?, cambiar al director del hospital, retirar al Dr. Félix Rivera PInto y nombrar al Dr. Erik Yafac Serrano, quien tiene que empezar de nuevo con la investigación y entonces demorar el proceso, eso es entrampar, obstaculizar y el responsable es el Dr. Fernando Farfán Delgado, entonces la denuncia penal la tiene bien merecida y en verdad debería ser disciplinado, me hace recordar a un influyente Dr. Braulio Cuba Corrido en el 2002, que tenía acorralada a la Red Clas. Tenemos entre manos documentos que prueban esa calificación riesgosa que tiene el hospital Manuel de Torres Muñoz y sabemos los riesgos a los que se expone ante una nueva evaluación y al obtener puntaje bajo, de menos de 50%, significaría no aprobado y correspondería baja de categoría, lo que sucede es que en esta evaluación se consideran una serie de macro procesos como direccionamiento, gestión de recursos humanos, gestión de calidad, apoyo diagnostico y tratamiento, gestión de medicamentos, manejo de Riesgo social, entre otros más, que al no tener puntaje adecuado en sus diferentes criterios, no se consigue una calificación final de más del 50%, entonces esa evaluación resulta desaprobada y traerá consigo baja de categoría en vez de elevarla y dotar al hospital del personal y logística, como corresponde a la demanda de la provincia de Islay, eso es castigar a la provincia, eso es declararse enemigo de la salud y la vida, eso es ser una institución totalmente insensible, frente a la real necesidad de la población. Entonces no solo una denuncia penal es la que corresponde, sino un pronunciamiento de toda la población con energía y declarar no grato al Dr. Fernando Farfán Delgado, y por un comportamiento irresponsable al personal del hospital, que ha permitido esta autoevaluación de puntaje tan mínimo, entonces también hay culpa en ellos y debería señalarse culpables. Además dejé para el final el siguiente razonamiento: La categorización de una institución hospitalaria debería ser materia de medidas correctivas, no de categorización, creemos que la categoría de la oferta sanitaria, debe responder a la demanda poblacional y esto es claro, Islay es un puerto, el segundo del país, tiene un valle productivo, se manejan combustibles ya que es el centro mayor distribuidor para todo el sur peruano, hay actividad pesquera, gran riesgo de incendios, entonces todo eso merece una atención sanitaria de envergadura y no lo que tiene ahora, un hospital II en abandono y mucho menos amparándose en una evaluación que en todo caso refleja la baja calidad de servicio ofertado, es decir requiere mejorarlo; querer bajarlo a un policlínico amparándose en una autoevaluación, es infantil, pueril, ridícula manera de administrar una red asistencial Dr. Farfán, esa autoevaluación exige más bien mejorar la oferta asistencial, está indicando que ese hospital no responde a las exigencias poblacionales, entonces, abandonar esa responsabilidad como Ud. lo está haciendo Dr. Fernando Farfán Delgado, es atentar contra la salud y la vida, que son derechos universales. Seguiremos de cerca este problema y nos comprometemos desde aquí, a seguir reclamando con insistencia y dedicación, porque la provincia de Islay merece nuestro aporte y entrega, no quedarse callados como lo hacen algunos medios de comunicación, llamados a preocuparse por el bienestar de la población.
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