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Jefe de Estado llama a la calma y pide a Arequipa recuperar la paz
social
2-04-2015
CREO QUE EL PUEBLO LE
PEDIRÍA A OTROS RECUPERAR LA CORDURA Y HACER NEGOCIOS CON
ESPIRITUALIDAD
Lamentablemente ya siendo adultos es difícil, aunque no imposible,
actuar en todos los acontecimientos de nuestra vida con
espiritualidad y es que en la educación holística se considera
oportuno educar a los niños hacia los negocios pero con
espiritualidad, es decir, es bueno ganar dinero, pero esto debe
hacerse con respeto a los valores universales, esto es uno de los
aspectos que asume la educación holística como necesario, en el
desarrollo de las diversas inteligencias con las que un niño nace.
Desde hace siglos viene imperando aquello que "el fin justifica los
medios", maquiavélica forma de hacerlo todo, es decir no importa
cómo, lo que se trata es conseguir algo, sea lo que fuera, de allí
que el Sistema, uno de los ejecutores de este principio, pisotea
pueblos, destruye naciones, divide geografías, con tal de conseguir
aquello que se propuso y lo ha venido haciendo durante centurias.
Así es como las transnacionales, con el gran poder económico y
político del que se han pertrechado, como parte de los medios con
los cuales disuade a gobernantes, políticos y también otros
empresarios, han venido actuando de esa manera tan impersonal,
porque justamente, el globalismo ha hecho esto de la humanidad, la
ha despersonalizado, le ha quitado el factor humano, para
transformarlo solo en grupos de negocios fríos y calculadores, en
donde si es necesario asesinar pues lo hacen y lo han hecho aquí y
en muchas partes, de modo que no se trata que los pueblos sean
llamados a la calma, sino que los que tienen el poder deben
recuperar la cordura y comprender que tenemos derecho a vivir en paz
y que los recursos que existen en nuestras tierras, no pueden
alegremente pasar a manos extrañas y ellos extraerlos al a costo de
agredir nuestra vida, nuestra salud, comprometer el futuro de la
gente que allí habita y que no deben repetirse ya, las historias que
conocemos, de empresas que inician explotando tierras aledañas, para
luego expropiarnos y expulsarnos hacia otros territorios.
Muchas comunidades tienen milenios viviendo y usufructuando de sus
tierras, la riqueza que les corresponde por historia, por origen,
por pertenencia y mal puede una empresa, haciendo uso de su derecho
de invertir, apropiarse del subsuelo y todos sus contenidos y por
eso pagar lo que ellos designen, sin tomar en cuenta la vida, la
salud, la pertenencia de lo que allí ellos han encontrado, siendo
los auténticos propietarios, el pueblo, quienes tienen entonces la
decisión en sus manos, de permitir o no la intrusión de estos
inversionistas extraños en sus tierras, quienes bajo toda prueba ya
demostrada pondrán en riesgo, reitero, la vida, la salud y el futuro
de estas comunidades.
Una sola vida es más que suficiente para que se desista de tal
propósito, pero aquí van ya cinco vidas, pero además cientos de
heridos en todos estos años y miles de peruanos atemorizados, que
claman porque esa calma, esa cordura y el respeto se dé con toda
claridad. Estos señores de las transnacionales, han envilecido a
personas que están ejerciendo profesiones tras de los micrófonos de
una radio, frente a una cámara de televisión o tras los teclados de
una impresora gigantesca, que emite diariamente miles de diarios;
si, los han envilecido y los han enfrentado a miles de peruanos, que
defienden la tierra, la paz y la vida.
No hay necesidad que esto sea así, vivamos en paz, dándole crédito a
otras maneras de conseguir el desarrollo, lo hemos dicho
innumerables veces: Agroindustria, Industria del mar, turismo, y lo
que se avizora como comercio internacional, petroquímica, nodo
energético, gasoducto, pero para todo ello es simple y necesario una
REPRESA y luego otros detalles accesorios e importantes como son
hospitales, universidades, etc., ampliar la frontera agrícola y
extraer riqueza de ella de maneras más productivas y adelantadas,
alimentando y sin riesgos innecesarios, porque el Valle de Tambo es
un emporio alimenticio histórico para toda la región y podría además
exportar a mayores escalas.
De modo que la paz, la calma, dependerán de hacer de lado estas
contaminantes exigencias, a pueblos trabajadores que buscan
desarrollar y se les debe otorgar lo que vienen pidiendo desde hace
muchos años y no se les ha concedido.
Ahora es el momento de hacerlo, dinero hay señores, somos
productores de oro, los primeros en el mundo, entonces empecemos a
sacar cuentas y veremos que efectivamente hay dinero, pero ese
dinero ha seguido rumbos que no eran los estipulados, es hora,
reitero, de sacar cuentas, entonces apreciaremos que no es necesario
imponer a sangre y fuego, a una empresa minera, que ya suficiente
daño nos ha hecho por más de sesenta años.
Dinero hay señores, saquemos cuentas, ¿dónde está ese dinero, todo
aquello que se vendió en el tiempo de Alberto Fujimori por ejemplo?,
¿dónde están las deudas millonarias del mismo estado y de empresas
como Telefónica?, ¿dónde todo aquello que ha sido robado y no
recuperado por alcaldes, gobernantes regionales y muchos otros que
han sido denunciados pero nunca enjuiciados ni sentenciados?, etc.,
etc.
Jorge Paredes Romero
Periodista y humanista peruano
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