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Pongamos en claro lo que sucede en Perú.
Jorge Paredes Romero
Periodista y humanista
peruano
.
28 de enero del 2021
Y digo en Perú, porque vivo aquí y percibo lo que sucede en nuestro
país, porque lo he recorrido, sino en su totalidad, creo en una
buena parte y he podido conversar con mucha gente de todo nivel
cultural y económico, a lo largo de mis 78 años de vida.
Hoy ya en siglo XXI, luego de más de dos centenas de años como
república, podemos decir con toda certeza, que vivimos en medio del
engaño, la mentira, la viveza y el aprovechamiento. No hay vergüenza
ni temor a Dios, no hay respeto a las leyes, todo estaría en venta,
porque hasta la salvación la pusieron en venta ciertos pastores, que
incluso han tenido la desfachatez de afirmar que el dinero lo
estarían dedicando a construir hogares en el cielo y otros que se
han atrevido a proferir maldiciones, a todos aquellos que no diezman
ni dan buenas ofrendas en el templo, donde ellos hacen y deshacen a
su antojo, en medio de feligresías que les obedecen ciegamente,
hasta el extremo de llegar a situaciones ridículas, en donde los
miembros, sean hombres o mujeres, se dejan manejar como peleles.
Pero lo que nos concierne a la mayoría de gente es lo referente a la
política, lo social, lo que compete a la educación, la salud, el
trabajo y la seguridad ciudadana y previsora. Son estos cuatro temas
los que requieren atención cuidadosa, para poder decir que una
sociedad estaría desarrollando o creciendo, sin embargo es lo que
estaría más descuidado e irresponsablemente mal administrado.
En educación ni qué decir, se ha venido descuidando a tal extremo,
que un estudiante graduado en universidades o institutos
tecnológicos, no estará calificado para desempeñarse en una empresa,
en donde es examinado y en los resultados se percibe mediocridad y
una paupérrima formación, sea técnica o profesional.
Toda la educación es un desastre, un instituto intenta formar
técnicos en tres años promedio y una universidad dice forjar
profesionales en un promedio de 5 años, de tal modo que un
estudiante inicia su formación a los tres años de edad y la culmina
a los 22 o 23 años, cuando estaría postulando a un puesto de
trabajo, por lo cual recibirá un salario mínimo de novecientos
treinta soles, que luego de los descuentos y gastos, quedaría
reducido a unos cuantos billetes, que no le alcanzarían ni para
comprar una muda de ropa.
Y es que en tres años de educación inicial fueron confundidos y mal
orientados, Luego en seis años de primaria su formación es carente
de bases fundamentales e integrales, reciben solo academismos
superficiales y son empujados a memorizar contenidos, que al repetir
en sus evaluaciones son aprobados, pero todos esos aprendizajes
resultan obsoletos para emprender una educación secundaria que
debería ser más completa y que desarrolle capacidades diversas y no
hacer de estos estudiantes simples jóvenes desinformados y carentes
de bases, para una posterior profesionalización o tecnificación
según las capacidades que hubieran sido descubiertas, bajo una mejor
función docente y magisterial.
La universidad e institutos tecnológicos ni qué decir, carecen de
oportunidad para aprender en la práctica, son escuchas de teorías
lejos de una realidad concreta a la profesión que aspiran desempeñar
y luego en tiempo de prácticas, son abusados y aprovechados como
aprendices y no porque vienen con una formación adecuada, de dónde
se ha venido en tratarlos de "pulpines", como un calificativo
despectivo.
La salud estaría totalmente descuidada, peor aún ahora en este
tiempo de “pandemia”, en donde existe una total incertidumbre acerca
de lo que realmente nos estaría atacando, al extremo que aquello que
hace medio año rindió buenos resultados, hoy es descalificado o
aquello que en otros países estaría curando, aquí es desestimado. En
cuanto otras enfermedades han quedado abandonados los tratamientos,
todo ahora es Covid19, vacuna y cementerio.
La sanidad es solo repartir pastillas y jarabes paliativos, fármacos
que atenúan los síntomas y hacen creer estar curados, cuando en
realidad tendríamos en ciernes, pacientes de futuros males crónicos,
mejores clientes de nuevos fármacos paliativos, pacientes de males
terminales.
El Sistema haciendo uso de la “biopolítica”, ha sembrado muchísimo
miedo, a través de medios que se han prestado a regar noticias, que
lejos de brindar paz y tranquilidad, habrían ocasionado mucha
incertidumbre, zozobra y dudas, acerca de lo que en verdad puede
hacerse desde las instancias gubernamentales, lo cual ciertamente
habría creado un status de caos, mucho miedo, lo que podría ser en
si el objetivo. ¿Con qué finalidad?
Persisten en tratamientos que ya en otros países han sido
descartados y se ha regado desinformación en los medios, de tal modo
que la población estaría en medio de grandes dudas, de donde se
viene a pensar que lejos de protegernos se estaría más bien
empujando a la muerte. Esa sería la impresión de un buen sector de
gente y en verdad preocupa.
En cuanto a trabajo, las empresas han cerrado, otras han quebrado,
mucha gente ha quedado sin trabajo, peor con la llegada de cientos
de miles de extranjeros, que no solo estarían desplazando a nuestros
trabajadores, sino que estarían sembrando confusión y desconcierto.
Muchos sociólogos, filósofos y economistas lo dijeron hace años, que
la clave residía en DAR VALOR AGREGADO a nuestra producción, pero
lejos de hacerlo se persiste en seguir exportando insumos para la
industria extranjera, descuidando lo que podría ser la solución a
nuestros problemas.
Hay un caso patético y es el de la importación de papa precocida
desde Europa, siendo la papa un producto natural y en abundancia en
nuestro territorio, sin embargo una empresa que pertenece un
poderoso grupo bancario y portuario, estaría importando cientos de
miles de toneladas de este tubérculo, desde hace varios años, con el
consentimiento de nuestros ministerios y gobernantes. (¿)
Por otro lado, también desde hace varios años, se viene pugnando por
imponer minería en diversas regiones de Perú, a sabiendas del daño
que produce esta actividad, toda vez que es practicada
contraviniendo normas de respeto ambiental y eludiendo el fisco,
gracias a leyes que han sido dadas hace diecinueve años, por un
presidente que fue elegido de la noche a la mañana y un ministro que
desde hace más de cincuenta años, viene perjudicando al país de
muchas maneras, sin que hasta hoy se haya hecho justicia.
Alrededor de todo esto se mueve un poder judicial totalmente
descuidado y dedicado a dar amparo a estas irregularidades, dejando
de hacer justicia y dando libertades a quienes han venido causando
daño a nuestra economía y al desarrollo del país, el cual se
encuentra intencionalmente frenado, con el objetivo de mantenernos
atrasados y dependientes, para de ese modo tenernos en una situación
de empobrecimiento, que solo nos ha venido causando gran daño, a
quienes lejos de encontrar bienestar social, estaríamos viviendo en
una situación indigna y degradada, esa es la verdad.
Por donde uno escarbe la noticia, se encuentra con alcaldes
corruptos, gobernadores regionales cuestionados, congresistas
irresponsables, es decir gente que ha sido elegida gracias a
promesas dadas que nunca tuvieron cumplimiento, en actos electorales
muy dudosos, a tal extremo que cierta vez un candidato dijo: “Voten
o no voten seré elegido gobernador” y así sucedió, creo que al buen
entendedor son suficientes esas palabras, para explicar qué estaría
sucediendo en el ámbito electoral y qué nos espera para dentro de
poco…
Por último tenemos que la seguridad está totalmente descuidada, la
institución policial esta muy cuestionada y muchos casos han sido
denunciados, pero nada ha mejorado, es más, se habrían cometido
crímenes amparados en esos desaciertos judiciales, en los cuales las
sentencias se arreglarían, tal como más de un audio lo habría puesto
en evidencia.
Es decir la corrupción, la inmunidad, la impunidad, el uso y abuso
de poder, estaría todo mezclado de tal modo, que no podría
distinguirse qué es lo que realmente merece ser valorado y qué
desechado por estar podrido.
Jorge Paredes Romero
Periodista y humanista
peruano
www.desarrollo.peruesmas.com
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