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Por qué ahora me
preocupa el cambio y el desarrollo de Perú Jorge Paredes Romero Ciertamente es algo que debe
preocuparle a todo peruano, por el simple hecho de haber nacido en
esta magnífica tierra con historia ancestral, sin embargo a pocos
les interesa lo que sucede con el país en su integridad, a lo mucho
tienen interés en su distrito, quizá en su provincia, pero si el
mayor énfasis de su preocupación está puesto en su persona y su
familia. |
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Creo que es lo que más pudimos apreciar
a lo largo de nuestra vida, los actos de injusticia, pero no a todos
les toca reaccionar del mismo modo, hay quienes incluso llegan a
considerarlo como algo intrínseco del ser humano, como si ese fuera
su destino, de allí quizá que la palabra paciencia esté a flor de
labios de muchos, a tal extremo que alguien creo la frase “sufre
peruano, sufre” Durante muchos años he venido escribiendo sobre la realidad peruana, dando énfasis en lo referente a salud y educación, últimamente, gracias al haber leído muchos trabajos de sociólogos y también de ensayistas, sobre lo que corresponde a la economía y el trabajo como fuente de riqueza y la seguridad en sus dos vertientes, la ciudadana y la previsional, es que me preocupan más estos dos pilares, que unidos a los anteriores vienen a ser fundamentales para elaborar toda una pequeña doctrina para el desarrollo, basado en la atención de estos cuatro pilares que han venido siendo desatendidos por muchos siglos y de manera intencional, eso es lo más grave, con la finalidad de sojuzgar a los pueblos. De allí que venimos afirmando reiteradamente, que la excelente atención a los cuatro pilares fundamentales de la vida es lo que daría lugar al desarrollo de un país, aquel gobernante que no preste atención a estos cuatro pilares, jamás podría decir que estaría preocupado por el desarrollo del país que gobierna y me refiero a: salud, educación, trabajo y seguridad integral, así en ese orden, porque lo básico, lo fundamental es la salud, sin ella es difícil, hasta imposible estudiar, educarse de manera completa, satisfactoria, y quien no haya recibido formación técnica y/o profesional no podrá aspirar a un trabajo formal, con una buena renta como recompensa y mucho menos aspirar a tener una pensión decorosa para los años de la ancianidad. Es por ello que ahora muchos ancianos no tienen una pensión segura, porque nunca tuvieron un trabajo formal, debido a que no tuvieron educación suficiente y es probable que ello sea debido a problemas de salud temporales o permanentes, que impidieron que esa persona en su juventud pueda estudiar y luego trabajar. Pero si se atendieran estos cuatro pilares de manera excelente, es decir una atención sanitaria en verdad curativa, una educación de calidad, completa, llevaría a un individuo para aspirar un trabajo rentable y estable y todo ello a procurarle para su vejez de una seguridad previsora, es decir una pensión acompañada de salud, respaldada adecuadamente. Haber percibido durante tantos años, que los distintos gobiernos que han hecho presencia en Perú, jamás se han preocupado por atender de manera excelente estos cuatro pilares, me llevó siempre a pensar que el problema en nuestro caso no es la falta de dinero, mucho menos de riquezas, peor aun podría alguien decir que carecemos de oro, es lo que más tenemos y lo que más escapa de nuestras manos, por culpa de políticos corruptos que han venido sucediéndose en los cargos, en este país donde estos malos políticos han traicionado la confianza puesta en ellos y se han dedicado a facilitar licencias y conceder tierras a quienes durante muchos años han venido explotando las riquezas existentes y se las han llevado al exterior para constituir la reserva, el sustento y el trabajo de otros, mas no de los que les eligieron. Esto es algo que se ha venido reiterando en cada gobierno instalado en el palacio de Lima y la tónica que han seguido los otros poderes, ha sido igual de perversa, todo lo han dedicado a favorecer a los extraños, a los dueños de grandes economías, dejando postergados a los pobres y a los electores que confiadamente les vinieron eligiendo en cada proceso electoral, en donde estos políticos mediante discursos engañosos han venido convenciendo a las masas, que ellos son los indicados para gobernar el país y una vez empoderados en los cargos, solo cumplían los designios de sus amos, de quienes invertían en ellos, para respaldar sus campañas electorales y volver la espalda al pueblo que les eligió. Todo esto ha sido visto y sufrido por
mí, nada he podido hacer porque carezco de poder para realizar el
cambio necesario, son las masas las que deben decidir con sus votos
a quienes elegir sin equivocarse, con la seguridad que esa persona
tiene el carácter, la sabiduría y un entorno humano que le
acompañará, en el acto responsable de gobernar, lo cual debe ser no
solo inteligente, sino bien intencionado, lleno de sabiduría y sana
voluntad. Solo habría que poner en acción el trabajo, que como he venido diciendo es fuente creadora de riqueza, es el trabajo el que transforma todo, el que da valor agregado, el que moviliza el oro, de tal modo que se pueden adquirir bienes mecánicos, que posibilitarían procesos que darían a nuestros insumos, que son numerosos y muy apreciados, para obtener subproductos que exportaríamos y con ello obtener una balanza comercial favorable, de tal modo que conseguiríamos por fin desarrollar, sobre todo a tener una población más saludable, mejor educada, con bastante trabajo y por ende asegurado su presente y futuro y esa vendría a ser el ideal perseguido por economistas decentes y honestos gobernantes, para desarrollar nuestro país. Estos métodos y estrategias deben ser ejecutadas por un gobierno de personas honestas, que tengan entre sus prioridades el bien común, el bien social y no el que han manejado quienes nos han venido gobernando, el enriquecimiento personal, sacrificando siempre el bienestar del pueblo que les eligió y confió en su persona, confianza que terminaron por traicionar siempre. Si para esto he sido salvado
temporalmente, valió la pena, ahora solo quisiera encontrar el o los
líderes que sean los indicados para conseguir este cambio y el
desarrollo que Perú requiere, para por fin recuperar todo cuanto le
fue arrebatado, por fuerzas malintencionadas que solo quisieron
aprovechar de nuestras riquezas y lo han venido haciendo, pero ya es
hora de ponerle coto a ello y dedicar esa riqueza a procurar vida
digna a nuestra población. No seremos nosotros quienes disfrutemos
de ello, pero si vislumbramos que serán mejores tiempos y será lo
que era el designio de La Providencia, para un pueblo que fue el
único que consiguió llegar a un buen estado cultural, en esta parte
del hemisferio sur, el único, el pueblo Inca. Jorge Paredes Romero |
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