La semana pasada, obreros encargados de instalar tuberías de agua en una escuela del poblado de Cocachacra, encontraron las momias de un hombre, de unos 35 años de edad, con uno de sus ojos abiertos y la de un niño de aproximadamente cuatro años, en buen estado de conservación. Lamentablemente, debido a que fue un hallazgo casual y no una excavación arqueológica, las momias resultaron un tanto dañadas.

Cocachacra, una ciudad puerto cerca de Mollendo, distante 780 kilómetros al Sur de Lima; está asentada en un lugar prehispánico, en lo que parece haber sido un antiguo cementerio de la Cultura Chiribaya, por los textiles y cerámicas encontrados en el lugar. Esta, floreció en el valle del río Ilo, entre los años 1,100 y 1,300 dC.

En el Perú es muy común hallar momias, considerando el vasto territorio que ocupó la Cultura Inca, sobre cuyos restos, se fueron cimentando nuevas civilizaciones. Sólo Lima, la capital, parece esconder bajo sus cimientos, poco más de 30 lugares arqueológicos. En uno de ellos, hace poco se hallaron 2,200 fardos funerarios.

Muchas de estas momias, han adquirido fama como "Juanita", a quien también se le conoce con el nombre de la "Princesa de Hielo", al haber permanecido bajo la nieve, por casi 5 siglos. Fue encontrada el año 1996, en las afueras de la ciudad de Arequipa, a 750 kilómetros al Sur de Lima. Sus restos parecen pertenecer a una adolescente de 14 años de edad.

Arqueólogos peruanos, están considerando iniciar una cuidadosa excavación en el lugar del hallazgo; donde se cree existió un cementerio precolombino.