Cómo les duele quedarse sin mamadera, escondiéndose en seudónimos es fácil hablar, de lejos o de cerca pongo mi nombre, esa es la diferencia. En Mollendo, antes todo estaba en su lugar, las puertas abiertas de las casas, no había droga, hasta el lenocinio tenía su lugar, ¡Por favor! y quien hablaba, daba su nombre y la cara, no se escondía en seudónimos.

Y por si eso fuera poco, los Alcaldes respetaban la libre elección de nuevos candidatos, no había reelección, la reelección siempre ha sido corrupción, por eso ha sido suspendida por el Congreso, de modo que por donde vayan pierden, “mala influencia”. De qué belleza pueden hablar sin agua; de qué progreso, con suspensión de electricidad; de qué adelanto, con el muelle adornadito? eso muelle debe producir y no ser un adorno, las playas son negocio municipal, mejor lo dejo ahí...

Además, qué tanto hablan de no estar en Mollendo, si el perfil de estos tipos que se dicen llamar “mala influencia” dice que están en Seul Korea, y que además culpan de todo cuanto sucede a los padres de familia, a los curas y a los profesores en la escuela, de modo que cuál será su filosofía de estos señores, que a mi juicio son lo mismo que “no hay quinto malo”, quienes desaparecieron por arte de magia al ser derrotado su defendido

Porque si hablamos del nuevo Islay, tendremos que esperar a partir del 1 de Enero, en que se inicia el nuevo mandato para recién empezar a considerar lo que venga en los planes de gobierno, en las obras, etc.

Ah y dicen que su alcalde no está en Mollendo porque sigue tramitando obras en Lima, no entiendo, según tengo entendido el Alcalde saliente siempre estuvo ausente de las sesiones del Concejo, ¿es que siempre se la pasaba tramitando obras en Lima? y ¿donde están esas obras? ¿En los adornitos a Mollendo? Un Acalde provincial debe dedicar su tiempo a obras de carácter provincial, no a los adornos de la casita de muñecas. La provincia requería superar dificultades de agua, de energía eléctrica, necesita la implementación de una universidad, de darle a ese muelle la utilidad requerida, de considerar el castillo como un icono de identidad, de preocuparse por la salud y no estar solo reuniéndose con los directores y el Gerente para las fotos y no dar soluciones.

Por eso ahora, ese hospital corre el peligro de ser solo un policlínico, cuando las necesidades sanitarias exigen tres hospitales para la provincia, uno en Matarani donde la exigencia es alta, otro en el Valle de Tambo con enorme población en el agro, y un tercero en Mollendo donde se manejan temas de pesca, combustibles, una carretera peligrosa peligro de incendios y una gran cantidad de población no asegurada, entonces de qué obra están hablando estos de “mala influencia” si las verdaderas obras nunca se hicieron, qué obras viene a tramitar a Lima para estar siempre ausente de las sesiones de Consejo? De las vereditas, del parquecito, de la pileta que de nada sirve, en estadio que lo hizo en cinco etapas, de una pirámide faraónica, de qué obras señores de “mala influencia”

Quizá si, la “mala influencia” hizo de su alcalde una persona que lamentablemente va a tener que rendir cuentas de esos dieciséis años de gobierno municipal con varias denuncias, la ultima involucrado en una lista de 126 alcaldes con indicios de corrupción, entonces de qué influencia estamos hablando, pues de la “mala influencia” de Uds. mismos que se han etiquetado así.

Los pobladores de la Provincia de Islay requerimos ahora tener noticias de lo que en verdad se necesita para toda la provincia, de la represa, del megapuerto, del Plan maestro de Aguas, de todas las facilidades para el gasoducto y la petroquímica, es decir obras de envergadura y no simples vereditas y piletitas malogradas.

Nosotros estaremos atentos a todos los avances de este gobierno y los que vengan adelante, porque ya reelección no habrá así que todos harán verdaderas carreras políticas que es empezar de regidor, ser alcalde distrital, luego provincial para seguir al parlamento, gobierno regional porque no postular a la presidencia de la república, esa si es una carrera política que debería tenerse en cuenta, de otro modo apoltronarse en un cargo no es carrera, es simplemente querer aprovecharse para enriquecerse o favorecer a los amigotes, que ahora en muchas de las municipalidades de Perú no reelegidas, están temblando, porque a partir del 1 de Enero se quedaron sin mamadera, tendrán que aprender a trabajar y no ya a vegetar en un escritorio sin hacer nada de nada y solo recibir sueldos cada fin de mes de parte del padrino o del amante como sucedió en el norte del país.

Gobernar una provincia requiere tener visión al desarrollo, capacidad de gestión no tener que agarrarse de las mineras, eso no es ser un político de verdad, un bueno para nada. A propósito de minera bien lo dice el economista Pedro Francke “que el modelo económico que se basa en la exagerada explotación minera, no es sostenible en el tiempo, no reduce la pobreza y genera conflictos sociales” y califica la elección de Richard Ale Cruz como “la protesta clara a la pretendida actividad minera”

Sin embargo siempre queda la posibilidad de que planteen una minería racional, entonces quizá se de la minería pero con respeto, con responsabilidad, acaso eso nos hace pro mineros? o pedir una minería racional anti mienros?, no señores simplemente nos hace personas que exigen cordura en el manejo del ecosistema, con toda la experiencia que ya se tiene en este tema aquí en el país.

No deseamos que la provincia quede estancada, deseamos el progreso, el desarrollo, pero este desarrollo debe ir de la mano con el respeto a los valores, a las buenas costumbres, de allí que Arnulfo Benavente en su artículo en Prensa Islay, cuando habla de sus recuerdos que también los hago míos, pues escribe sobre las bondades de ese Mollendo que muchos conocimos y añoramos, en donde si había progreso escalonado con respeto, cuando veíamos que realmente la alimentación llegaba al mercado San José cuando disfrutábamos de buenas playas y de buena comida, cuando había bonito futbol, con clubes que se disputaban los mejores jugadores, nosotros vimos eso, y lo añoramos; cuando en verdad había respeto por la propiedad ajena y podíamos fácilmente ingresar a una casa de la vecindad, porque la puerta estaba abierta, y simplemente llamábamos por su nombre y nos decían ¡adelante!, y pasábamos a departir, a intercambiar un platillo de comida o simplemente un refresco, no como ahora que la prostitución, la droga, la delincuencia, la gente que se esconde en anónimos para estar chantajeando, amenazando.

Ahora cuando podemos apreciar una provincia diferente con crímenes con atropellos y con situaciones nada agradables, no hay seguridad ciudadana, porque ese progreso se basa en la vil moneda, en la coima, entonces atrae gente de mal vivir y en el descalabro de valores, porque gente extraña y reitero sin valores, llega a la provincia, específicamente a Mollendo a disque a trabajar, cuando en verdad vienen a vegetar.

Cuando ese Ceticos atrae gente de otros lugares, dedicándose a los fierros, a la chatarra, cuando en realdad debería estar trabajando en el interior de esos Ceticos gente de Mollendo, del Valle, de Matarani, transformando, es decir dando valor agregado a la pota, a los vegetales, tal como lo dicen las siglas de CETICOS: trasformar, exportar, no dice traer chatarra importar basura.

Entonces cuando Mollendo tenga en su suelo gente solo de trabajo, de estudio, tendremos un modo de vivir diferente, el mismo que teníamos antes, donde nuestra ocupación era esa, estudiar y trabajar. De allí que se necesita urgentemente implementar la universidad, ese muelle y que haya agua y energía garantizadas, de ese modo el trabajo se dará.

Cuando empiecen la petroquímica y los hidrocarburos, entonces empezaran a crearse fuentes de trabajo para todos, faltaran manos, y si la minería se diera, pues también habrá lo propio, pero ojo, exigiendo garantía para los relaves, o cualquier residuo existente, porque todo trabajo minero deja residuos y eso viene a ser un Pasivo ambiental muy pesado, el mismo que existe por millones de toneladas regados en todo el país, y de eso tienen inventarios y estadísticas el Ministerio de energía y minas, lo tiene, yo lo he visto, y eso el MINEM debería hacerlo público, así como se desesperan para organizar talleres, a donde invitan a líderes y comunicadores, para qué después hablen a favor de la minería, les pagan pasajes, hotel, comida y que se yo, para que reciban en Lima adoctrinamiento favor de la minería. Eso hace el Ministerio de energía minas, pregunto ¿esa es la forma de proteger a la población? El rol del ministerio debe ser ese, proteger a la población, preocuparse de los impuestos y el Canon pero también de que la explotación del mineral se realice con respeto a las leyes a la salud y a la vida y no adoctrinar a comunicadores para que hablen a favor de la minería.

Espero que con esto quede toda más claro para estos señores de “mala influencia” y para quienes aun confíen en que el desarrollo de Mollendo está en camino, esta por empezar, y así estaremos atentos a ello. Muchas gracias.




Jorge Paredes Romero
Periodista peruano
Registro FPP 7703