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Preguntas sociales

Resumen de Seminarios, Conferencias en diversas invitaciones.

Jorge Paredes Romero (Humanista)

26 de Agosto del 2012

¿Por qué existen las pandillas juveniles? ¿Por qué existen las guerrillas? ¿Por qué existe la corrupción a todo nivel? ¿Por qué hay hijos que matan a sus padres y viceversa? ¿Por qué existen profesionales mediocres? y tendríamos que hacer una larga lista de preguntas, muchas al final quedarían sin respuesta o simplemente ensayaríamos algunas explicaciones, según la inclinación política o filosófica que tengamos, pero si se tratara de una reunión, no habría consenso, ya que surgirían una serie de opiniones y no se llegaría a un acuerdo.

Esto sería así, porque sencillamente nadie querría en esos momentos reconocer que, parte de la responsabilidad está en nosotros mismos y las primeras víctimas de este descalabro social son los niños, por ser los más débiles, los más expuestos, y los que finalmente pagan las consecuencias, de este desarreglo e irresponsabilidad social. Las generaciones que se harán cargo de gobernar el país, estará en estos niños, al crecer y mal educarse, sin valores, con principios torcidos, etc., todo por culpa de nosotros, la sociedad permisiva y los gobernantes  que tenemos, tuertos y sumisos al Sistema.

Los comportamientos de los adultos, son consecuencia de su propia formación, de aquella que recibieron primordialmente en sus hogares, luego en la escuela, la universidad y las mismas calles, en donde tuvieron la oportunidad de convivir con otros niños y jóvenes, que al igual que ellos, no tuvieron la oportunidad de disfrutar de un hogar, una buena escuela, maestros dedicados, menos de gobernantes honestos, ni representantes transparentes y cumplidores de su palabra.

Los hogares se construyen en base a parejas de jóvenes, que deciden unirse para ser felices, procrear hijos y formar una familia, pero muchas veces estos jóvenes, que no tuvieron la oportunidad de planificar ese paso trascendental en su vida, muchas veces terminaron conviviendo en unión libre o concubinato, con la novia esperando un bebé y alojados en la casa de sus padres o alquilando una vivienda muchas veces precaria, sin acceso a la seguridad social, mucho menos a un trabajo estable y bien remunerado, es decir las responsabilidades les cayeron de sorpresa, porque ellos mismos se dieron con la sorpresa, que la novia terminó embarazada sin haberse casado. Muchas veces ellos, se encontraban estudiando en un instituto o quizá universidad, o en el peor de los casos, ni eso tenían frente a sus rostros adolescentes, de pronto se vieron envueltos en esa situación, porque nunca pensaron en que esto podría suceder; tenían información, pero imprudentes se dejaron llevar por la premura del placer y cayeron en las redes de la improvisación y el lamento. Todo eso, es consecuencia de la inadecuada educación que recibieron, desde la primera infancia. El ser humano recibe educación desde que nace, aun antes, puedo demostrarlo.

Quizá algunas parejas se dejan arrastrar por la criminal decisión del aborto, o sencillamente por lo que ahora prolifera, el abandono de la criatura y hasta el crimen del recién nacido. Es decir, tempranamente se ven marcados por el delito y la terrible carga de conciencia, que no les abandonará jamás en su vida. Pero en el caso que decidieran afrontar la situación, pues tendremos a dos jóvenes que truncan sus ilusiones y de seguro son incapaces de romper la cadena. Tengo la plena seguridad que el porcentaje de aquellos que llegan a la boda, planificada, con trabajo, profesión, terreno y una pequeña cuenta de ahorros, con la mínima cantidad, no sobrepasan el 10% de parejas.

Esos niños procreados en medio de la irresponsabilidad, luego son criados por los abuelos o algún buen vecino, quizá en una guardería, sin las mínimas normas de aprestamiento educativo, ni atención al desarrollo afectivo y emocional, con acceso al juego y entonces ya tenemos las primeras víctimas de la irresponsable y temprana procreación de hijos y esto es así porque, ambos padres tienen que salir a la calle a estudiar o buscar un trabajo temporal, mal pagado, sin beneficios sociales, estos jóvenes ya empiezan a sufrir las consecuencias de la precariedad de sus vidas, de la intransigencia social y del aprovechamiento de aquellos que tienen la sartén por el mango, porque quienes les contratan, son los que se benefician de la necesidad de estos jóvenes, con una deficiente formación académica, sin fundamentos técnicos, sin profesión y con la premura de llevarse alimentos a la boca y cuidar de una criatura. De pronto se ven envueltos, en la urgencia de atender una enfermedad del débil retoño que procrearon y al no tener seguro, pues deberán hacer gastos de envergadura, prestarse dinero o tener que recurrir a torcidos caminos, allí empiezan a retozar con el crimen y la ilegalidad, hay quienes venden su sangre, otras chicas venden su cuerpo y todo aquello que tenían como ilusiones en su mente, se esfuma día a día, como el humo de hojas secas, en una fogata para calmar el frío.

Son estos niños que, muchas veces sin educación inicial, son matriculados en colegios primarios, en donde reciben una educación mediocre, paupérrima e irresponsable, con maestros que muchas veces lograron un título luego de haber sufrido un mil de afrentas y haber vencido muchas barreras que se les fueron presentando en el camino, maestros que recorrieron caminos idénticos a los que ahora son sus alumnos. Estos niños, en las escuelas de barrio, van aprendiendo muchas formas de cómo defenderse en las calles, que es por donde mayormente trajinan, en la escuela van intercambiando información, sobre lo que podría sucederles cualquier día en los  callejones del barrio, son otros mayores los que van dando esa información y que no es puesta en evidencia, porque sus mayores, sean padres y maestros, la desconocen; historias de violaciones, de raterías y adquisición de jergas, códigos y comportamientos que les permitirá defenderse de los abusos de otros, es que ya tienen aprendidas muchas mañas y esto sucede con niños y niñas, de modo que, las calles resultan mucho más aleccionadoras que las aulas de la escuela. En las aulas, los maestros se desgañitan, regla en mano, para lograr la atención de niños subalimentados, somnolientos y con los rastros de picaduras mil en su cuerpo, con el hambre que les carcome los intestinos. En las calles, los niños intercambian información, licor, drogas, cigarros, un partido de fútbol y acceso temprano e irresponsable al sexo.

Esa es la realidad de muchos niños latinoamericanos, que poco a poco se va superando, gracias a los esfuerzos de gobiernos conscientes, que van desarrollando una serie de planes en busca de solucionar los problemas sociales, situaciones que van colmando la paciencia de los funcionarios, pero que algunos, gracias a escuchar el buen consejo de asesores entendidos, van descubriendo que, la mejor forma de contrarrestar los males de la sociedad, es con la debida atención de la salud y la educación. Solo brindando estos dos tesoros a la niñez, podrán vencerse los ímpetus de la maldad, enquistada en algunos corazones, que se traduce en violencia de todo tipo y nivel. Esa violencia se canaliza en las calles, en las escuelas, en los campos deportivos, en los hogares, en el cine, en algunas canciones, es decir lo atrapa todo, solo es cuestión de analizarlo todo con calma y orientar a los niños con amor.

Lo que deben entender todos los gobiernos, es que la niñez requiere desde su venida al mundo. permanente atención, hasta que llegue el momento en que reciban sus documentos de mayoría de edad, siempre y cuando hayan recibido durante esos dieciocho años. una formación auténtica, completa y responsable, verídica, transparente y dialogada. Es de suponer que el embarazo haya sido debidamente atendido, porque también de allí depende mucho la salud de los niños y que el parto haya sido atendido con todas las coberturas posibles, sanitarias, afectivas, económicas, nutricionales, etc., porque de otro modo. entonces. ya tendríamos niños con problemas de salud, antes o en el momento de nacer, problemas muy graves y lo que es peor, algo que pudo evitarse, en este caso una responsabilidad del sistema. que muchas veces es desatendido.

¿Pero qué sucede. cuando miles de niños son matriculados en las escuelas. donde existen maestros irresponsables? Pues son aquellas escuelas. donde algunos maestros ociosos, porque otro adjetivo no se les puede dar, eluden sus obligaciones y solo se limitan en un primer momento. a revisar algunas tareas y luego a indicar nuevas tareas para los estudiantes, pero nunca les enseñaron a resolver esos problemas, ¿increíble verdad?. Pero así sucede en muchos colegios peruanos, donde los maestros se limitan a señalar a los estudiantes, que deben resolver los problemas de tal pagina y listo.... Esto trasladado a la vida real, es lo mismo que hacemos todos los adultos hoy, colocamos a los jóvenes frente a retos, barreras,  dificultades y esperamos que ellos los resuelvan, sin nosotros haberles nunca enseñado a hacerlo, y cada día vamos dándoles nuevos retos, creándoles nuevos problemas, que ellos no podrán resolver.

Entonces surgirán los descontentos, la insatisfacción, las protestas, y es lo que sucedió en algún momento en Chile, donde los alumnos tomaron las universidades, exigiendo educación de calidad. Los adultos  siendo políticos, gobernantes, docentes, se pasan la gran vida, dejando de hacer lo que les corresponde, dejando que los niños resuelvan sus propios problemas y después esos adultos se quejan, simplemente llaman por teléfono a la policía u ordenan al ejército, que enfrente con balas y helicópteros, a gente que se rebela por el descontento. Esa gente que protesta hoy, es la que fue desatendida ayer. De allí que la solución está en la escuela, aun antes…

Entonces, ¿qué hacer para corregir todo cuanto viene sucediendo?, es sencillo, se deben implementar programas educativos pilotos, con las mejores corrientes y teorías que tengamos a mano, nosotros propugnamos el Holismo. Los filósofos, psicólogos, han trabajado durante centenares de años, para dejarnos las mejores herramientas, para lograr que los jóvenes enrumben hacia mejores destinos, entonces cojamos esas tecnologías y emprendamos una lucha frontal contra la abulia, la irresponsabilidad, la inercia, y protejamos a nuestras generaciones venideras, con verdaderas escuelas, ya que la educación es la mejor arma contra el subdesarrollo y la corrupción, contra la delincuencia y la violencia y contra el desamor y la negligencia. Tenemos que hacer los mejores esfuerzos para educar a nuestros niños y no cometer la estupidez de seguir comprando armas, tanques y cohetes para autodestruirnos. Eso nos llena de temor, de rencores y desaliento, la educación nos hará libres y consecuentes. La humanidad tiene armas para destruir este planeta muchas veces, cualquier momento, un error informático, podrá desatar una hecatombe, entonces para qué seguir confiando en esa tecnología bélica, por qué no mejor confiar en el saber, en la solidaridad y dejar de lado esa educación competitiva, destructiva que realizamos en aulas, mejor deberíamos reunir a los alumnos, para que aprendan entre todos a resolver solidariamente los problemas, así tendremos una cultura de paz y compañerismo. De seguro que sus almas menos contaminadas, tienen mejores soluciones... Competir en el aula lleva a malos resultados, es mejor aprender en solidaridad.

Pero ¿Qué está sucediendo en toda América Latina en el tema educativo? Pues sencillamente la educación a todo nivel, está terriblemente descuidada y esto ha sido hecho a propósito por el sistema, a propósito, para de esa forma tener a las masas desinformadas, desactualizadas e incultas, sin capacidad de respuesta a los múltiples abusos que ese sistema viene cometiendo en todos los países hispanoamericanos. Ese sistema, está conformado por gobernantes, funcionarios, congresistas, políticos, autoridades diversas y gente que de una manera u otra, está encaramada en cargos públicos, todos ellos son solo serviles lacayos del Sistema, que es el encargado de dar directivas a todo este conglomerado humano, esa malévola gente, se ha convocado a la voz de “Dios los cría y ellos se juntan”, son los explotadores, los que servilmente están al mandato del poderoso sistema, que les paga sueldos y protege con una serie de subsistemas regados en todos los países, con la única finalidad de hacer prevalecer el mandato del sistema.

Ahora bien, ¿A qué se dedica ese sistema? Pues a explotar recursos de diversos países, mediante una serie de empresas, que utilizan grupos humanos como  obreros y empleados mal pagados, pero que también son serviles a quienes les da de comer, muchos de ellos son totalmente cegados por los salarios que reciben. Otros son sencillamente maniatados por el pan que llega a sus bocas y a los de su familia, pero hay una cantidad grande de gente consciente, que sabe que están haciendo daño a sus congéneres, pero prefieren seguir así, a tener que pasar a formar parte de la plebe segregada, excluida y postergada, porque saben que los pocos privilegios de los que disfrutan acabarán. Terminaron atrapados por el Sistema.

He tenido oportunidad de conocer la realidad de otros países sudamericanos, comprobando que efectivamente esta situación pervive día a día en esos lugares, que la gente igualmente permanece cegada, obnubilada, postergada, excluida, no puede acceder a servicios de calidad, entre ellos los de salud y los de educación, básicos para lograr tener calidad de vida, es decir una existencia digna con posibilidades contestatarias, con derecho a trabajo, vivienda y seguridad social, es decir, la mayor parte de la población vive en condición paupérrima, lindante con la miseria  y así subsiste, esperanzada en que algún día acabará ese sistema de cosas, muchos de ellos cegados incluso por prédicas que les piden paciencia, pero esa paciencia les acompaña hasta la tumba y generación tras generación, heredan esa miseria y siguen escuchando la prédica constante, desde muchos balcones: ¡somos democráticos! ¡La pobreza será vencida! ¡Bienaventurados los pobres! ¡Cuándo yo sea presidente…! Y cosas así, cuando la solución es fácil, emprendamos una nueva campaña educativa y en dos generaciones habremos cambiado todo ¡Estoy seguro que lo lograremos! ¡Demos el primer paso! Deseo tener la oportunidad de ayudar, estoy seguro que es posible... Contacten conmigo, puedo viajar a donde se me convoque...